artículo aparecido en el Ruta 66 (Junio87)
Santi Palos


Mar Otra Vez
 "Algún paté venenoso"
 GASA

Recuerdo que hace unos pocos años llegaron los ecos de un grupo
que había irrumpido con fuerza en la escena madrileña. Se decía
que erán practicamente los únicos  en fabricar, basados en la
instrumentación de guitarras-bajo-batería , canciones diferentes
obsesivamente urbanas, chirriantes, que podian ser el equivalente
patrio, salvando las distancias, de los Contorsions o Birthday Party.
que se esperaban grandes cosas de ellos, que si "malditos", "una
banda de culto", "prometedores", "un choro de aire fresco".
Eran rumores referidos a Mar Otra Vez, una formación a la que,
como las que antecedieron, reconozco no haber seguido su
trayectoria, pero que el buen recuerdo de algunos de sus 
temas (Ámame) publicado en discos anteriores y oido en
cualquier programa de radio enrollado, hizo que esperase más
de este "Algún paté venenoso". La verdad es que lo que ofrece
aquí  el cuarteto madrileño es una de cal y otra de arena.
En el lado positivo, se les agradece un sonido tan áspero como
personal, la busqueda de una originalidad que les distancie del
trabajo de otros grupos, y, especialmente esa agria sordidez,
teñida de un sentido del absurdo, que transmiten en música y
textos. Látima que sus (válidas) ideas e intenciones no acaben
de concretarse en ninguno de los diez cortes. Poco inspirados,
muy similares entre si, suena a una mala consegida mezcla de
varias cosas , a un quiero-y no-puedo, falta quizás de una
mayor técnica musical -que no instrumental- que hubiera 
permitido unos mejores resultados. Tal vez haya alguna 
excepción, como "Víspera de la Nochebuena" o 
"Miercoles cercano al infierno" o momentos sueltos,
pero en conjunto resulta un LP bastante flojo, 
decepcionante incluso, al que uno intuye una capacidad
superior a la demostrada en este album.

 


 
 
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